jueves, 10 de enero de 2013

ESPECIAL EXPRESIONISMO (IV)

3.3. El Expresionismo de Murnau y Lang.- Wiene, tras algunos intentos, no consiguió mejorar ni siquiera igualar su obra maestra Caligari, además el mérito de esta película es tema de controversia pues algunos autores sostienen que tanto Carl Mayer, el guionista, como los directores artísticos tienen un peso mucho mayor que el director en la realización del filme. No ocurre lo mismo con los dos mejores cineastas que haya tenido nunca Alemania: Friederich W. Murnau y Fritz Lang. Ambos llevaron el cine germánico a cotas jamás alcanzadas, si bien sus obras distan de la pureza de Caligari en cuanto a integración de todos los elementos expresionistas. De hecho, ninguno reconoció explícitamente estar integrado y ni siquiera de acuerdo con la corriente expresionista. Sin entrar en el debate de qué película pertenece al movimiento expresionista y cuál no, lo que sí se puede es analizar estos importantes autores y distinguir en sus obras las características propias del movimiento. 

Nosferatu, el vampiro

Murnau.- Fue discípulo de Max Reinhardt, por lo que la influencia del hombre de teatro fue decisiva en su cine. Los famosos juegos de sombras en Nosferatu el vampiro (Nosferatu, Eine Symphonie des Grauens, 1922) deben mucho a la puesta en escena de Reinhardt. Quizás sea esta la película más expresionista de las realizadas por Murnau.  Narra la leyenda del conde Drácula, que tantas veces fue llevada al cine. Los problemas con los derechos de autor, fueron los que llevaron al director a cambiar los nombres originales de los personajes: Conde Orlock o Nosferatu en vez de Drácula.
La película se aparta un poco de la corriente expresionista al filmar muchas de las escenas en exteriores. Murnau se sirve de la naturaleza para expresar un ambiente de desasosiego e inquietud continuo. Las olas rompiendo violentamente nos anuncian la llegada de Nosferatu a bordo de un barco fantasma. El aspecto desolado de los paisajes, que intercala el director en el viaje inicial del protagonista a Transilvania, también ayuda a crear esa atmósfera. 


Murnau no necesitó decorados expresionistas: tenía las calles de Bremen

Los pueblos y los castillos son reales, pero acompañan al ritmo aterrador que impone el director. Las callejuelas de la ciudad no necesitan de decorados artificiales para expresar esa sensación de agobio. El edificio donde habita Nosferatu con fachadas inclinadas y casas agolpadas unas sobre otras, confiere el mismo sentimiento amenazante que los decorados pintados de Caligari. Este es realmente el mérito de Murnau: una realización expresionista sin el menor artificio.  


Por otro lado Murnau es fiel a los preceptos expresionistas en el momento en que utiliza los juegos de luces y sombras o cuando dirige a sus actores. El propio conde Orlock, interpretado por Max Schreck, es el típico personaje expresionista. A lo largo de la película su fisonomía se va haciendo cada vez más repelente, gracias a cambios de maquillaje progresivos. A su figura inquietante siempre le precede una sombra estilizada que se va agrandando por momentos. Tanto el dueño de la inmobiliaria como la protagonista, carecen de personalidad y su presencia sólo tiene el sentido que Nosferatu les confiere.  

Contrapicado de Nosferatu en el barco

Lo mismo se puede decir de los objetos animados que están presentes en su cine, véase la hamaca que continua moviéndose después de que su ocupante haya muerto y ya no se encuentre a bordo. O los ataúdes apilándose unos encima de otros. En lo que se refiere a su estilo narrativo se encuentran diferencias fundamentales con respecto al estatismo de Caligari: Murnau utiliza el montaje para inferir el estado de ansiedad que la acción requiere, y el manejo de la cámara es más dinámico. Los ángulos con los que presenta a Nosferatu en el barco, por ejemplo, hacen que la oblicuidad parezca proyectarle fuera de la pantalla.

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22 comentarios:

  1. Nosferatu sigue provocándome el mismo pavor que el primer día que la vi... y ya ha llovido. Murnau, qué grande.

    Un saludo

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    1. Es curioso como la mayoría de las películas de terror se convierten en parodias con el paso de los años. Ésta no.

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  2. Ver Nosferatu es una de tantas asignaturas pendientes quien sabe quizás estos dias que estamos envueltos en niebla sea un buen momento como en su día fue disfrutar de la lectura de "Drácula" de Bram Stoker.
    Un saludo

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    1. Vas a quedar verdaderamente impresionado. Ya verás.
      Un saludo.

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  3. Nosferatu es una pasada. Como bien comentas, es desasosegante. El personaje está tratado para que repele absolutamente y meta miedo.
    Un saludo, ethan.

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    1. Creo que es el personaje más terrorífico de la historia del cine.
      Un saludo.

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  4. Qué lujo, Ethan. Venir por aquí y leer nombres que son las esencias del cine; la arqueología de la pantalla mágica. Hablando de ese genio que fue y lo sigue siendo en las filmotecas de todo el mundo, F.W. Murnau. No hace mucho vi ese film tan hipnótico como curioso de E. Elias Merhige, basado en la epopeya del rodaje de “Nosferatu” en 1921. Un W. Dafoe en estado de gracia en el papel del auténtico vampiro, Max Schereck por la Europa del Este. Una delicia. Abrazos y bienvenido al 13

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  5. Un papelón el de Dafoe en esa peli que nombras, con Malkovich haciendo de Murnau. Más interesante, creo, es la propuesta de Herzog con su remake de Nosferatu, con Kisnki dando vida (o muerte) al vampiro. Pero la original sigue siento una obra maestra de todos los tiempos. Abrazos.

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  6. He llegado a tu blog por una amiga y he decidido quedarme.

    Magnífico post, tendré que ponerme manos a la obra y empezar desde la primera parte. Saludos. Mario

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  7. Un post magnífico, amigo Ethan,

    La versión expresionista del “Nosferatu” de Murnau, marcó mi juventud. La pasaron en el cine de barrio y, allí que me marché. Pegué unos cuentas saltos/chillidos en el asiento y quedé profundamente afectada por ese intérprete que me hechizaba a pesar de su fealdad. Creo que, ya por entonces, comprendí que la inmortalidad es lo que hace de este personaje –máxime en versiones donde los claroscuros juegan un papel fundamental-, uno de los más idolatrados.

    Un abrazo, Ann@

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    1. Muy agradecido, amiga Anna. La sombra de Nosferatu nos acompañará siempre a todos los que la hemos visto emerger en la gran pantalla.
      Un abrazo.

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  8. Lo que tenía que ser una experiencia inolvidable sería haber visto Norferatu como espectador de aquella época...

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    1. Me imagino a la gente huyendo aterrorizada de las salas de cine...

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  9. Hace mucho tiempo vi Nosferatu pero no me gustó, pero quiero volver a verla, siento que con una nueva mirada me va a agradar, siento que tengo más paciencia para ello. Un abrazo.

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    1. Esta película, esta obra maestra de todos los tiempos, merece otra oportunidad, seguro que sí.
      Un abrazo.

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  10. "Nosferatu" es una obra maestra inigualable, como bien dices. Sí me gustó la aproximación que hizo Herzog, otro director alemán que yo sumaría a tu lista de dos (aunque Fritz Lang fuera austriaco, ¿ o era imperio austrohungaro, como diría Berlanga?), en la distancia de décadas. Y a Fassbinder, claro, y a Lubitsch. ¿Y el "Vampyr" de Dreyer (magnífico) no sería expresionismo también, tardío o de transición, como el gótico, je, je?
    Saludos.

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    1. Claro que sí, Lubitsch al lado de estos dos monstruos. Después el resto, "austrohungaros" o no como Wenders, Haneke, Schlondorff,... (aquí no incluimos a los "americanos" Wilder, Siodmak, Zinnemann, Ulmer, Curtiz, etc). Ojo, una mención especial a Pabst.
      Saludos.

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  11. Gran entrada de cultura cinematográfica. Es curioso ver que en los años 20 y 30 los verdaderos maestros del drama eran los centroeuropeos, mientras que los estadounidenses destacaban en la (tragi)comedia. Luego vino la guerra y ya se sabe, EEUU siempre ha sido tierra de acogida y oportunidades.

    Un saludo

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    1. Los Estadounidenses creo que destacaron en todos los géneros y en todas las épocas, pero es cierto que el modelo de representación propio del expresionismo se dio primero en el centro de Europa. En USA vino más tarde y ya era el neoexpresionismo del que hablaremos en los próximos capítulos.
      Saludos.

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  12. Recuerdo cómo me impresionó la escena del carruaje rodada en negativo. Con un punzón rasgaban la película para simular los relámpagos. Todo muy rudimentario pero conseguía un gran efecto irreal. Saludos. Borgo.

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    1. Lo dicho: verla en la época en que se estrenó debía ser toda una experiencia aterradora.
      Saludos.

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