lunes, 12 de enero de 2015

MAGIA A LA LUZ DE LA LUNA (Magic in the Moonlight de Woody Allen, 2014)

Tras el paréntesis de Blue Jasmine (muy bueno, por cierto), nuestro pequeño director de grandes gafas y cara de despistado vuelve a viajar a Francia -esta vez a la costa azul, pero de nuevo a los años veinte- para rodar su habitual película anual, si bien, en esta ocasión los resultados no nos han parecido tan atractivos como en su anterior aventura parisina.



Allen regresa con una comedia romántica, con una historia sencilla que se apoya en la lucha entre el escepticismo y la magia del amor, la que es capaz de transformar una vida insulsa y pesimista en algo que merece la pena ser vivido. Para llegar a una conclusión tan evidente, el realizador disfraza el conflicto con algo más divertido: un ilusionista famoso (Colin Firth; el escéptico) es animado a desenmascarar a una supuesta médium (Emma Stone; la que conseguirá enamorarlo) que opera en La Provenza francesa.

El argumento arranca de buen cariz dados los divertidos antecedentes en un cine, el de Allen, que se encuentran repleto de este tipo de personajes. Prestidigitadores, magos, hipnotizadores y toda clase de impostores son asiduos en los guiones del realizador y a veces, como es el caso, son el desencadenante de la trama principal (Scoop, Conocerás al hombre de tus sueños, La maldición del Escorpión de Jade, etc.).


Sin embargo, como si fuera uno de los trucos del protagonista, el planteamiento es sólo una ilusión cuando, finalizado el largometraje, comprobamos que el filme de Allen es el más flojo desde el desastre de Vicky Cristina Barcelona. Es cierto que deja mejor sabor de boca que la fallida cinta rodada en España, pero Magia a la luz de la luna tampoco aporta mucho a una filmografía repleta de buenos largometrajes. La culpa la tiene una trama sosa que no cumple con las expectativas, diríamos que simplona y previsible, que desarrolla mal la historia de amor y, lo que es peor, carente del sentido del humor, algo que suele ser el principal activo en los filmes del director neoyorquino.

Aunque tampoco se luce Allen especialmente desde el lado técnico (lo suyo no son los encuadres que quieren aprovechar el formato panorámico), sí destacamos un par de aciertos, uno general y otro más concreto, que nos recuerdan que nos encontramos ante una leyenda viva del celuloide. El primero se refiere a la agradable descripción de un pasado nostálgico que Allen piensa debió ser mejor (como una continuación de la citada Medianoche en París), subrayado por el colorido propio del artista que se encuentra en su etapa final (nos recuerda a Resnais o a algunos pintores); y la segunda tiene que ver con una escena que se desarrolla en el observatorio astronómico, es la que da título a la película y aunque no sea suficiente para salvar la película, sí que nos dice que el mejor Woody Allen sigue ahí; nosotros lo esperamos en su próxima cinta.



22 comentarios:

  1. Bastante de acuerdo con tu análisis.

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    1. Esperemos que se recupere de este bache y la siguiente (que ya está en preproducción) sea de las buenas.

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  2. Totalmente de acuerdo. En algunos momentos solo me provocaba el bostezo.

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    1. Sí, a mí también me aburrió, algo impensable en una cinta de Allen.

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  3. No muy de acuerdo,Ethan.Puede que no sea la mejor,pero deja al descubierto muchos de sus signos de identidad,por no mencionar el cuidado puesto en la luz,en la ambientación,en la música....los años 20 son evocados de una manera casi idílica.A ello,añadimos la filosofía que subyace en estas últimas películas,persiste el debate en torno a las cosas que merecen la pena en la vida,el racionalismo frente a la fuerza de lo irracional,aquí teñido de ese halo mágico que siempre persiguió a Allen desde niño,cuando era aficionado a los trucos de magia.
    No diré que es una obra maestra,pero ofrece más que muchas de las películas que están en cartelera y nos deja una sonrisa en el rostro con ese claro mensaje optimista y esperanzador.
    Un abrazo

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    1. Bueno, pues me alegro de que al menos a ti te haya gustado. La parte técnica está conseguida, sobre todo con esa luz y los colores, pero falla en los encuadres de un formato que no suele usar (será porque no lo domina).
      Lo de su afición a la magia está clara en muchas de sus películas, no es nada nuevo, pero aquí resulta un poco simplona la trama y desde luego muy muy previsible; todos sabíamos lo que pasaba y lo que iba a pasar. Y encima sin gags que llevarnos a la boca. Regular solo.

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  4. No la he visto, pero por lo que dices pienso que quizás se esté agotando. Claro que con tanta producción todo no va a se bueno.

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    1. Esperemos que no se haya agotado; ya está con la siguiente. Es cierto que estamos ante una filmografía extensísima, con un nivel medio muy alto; es normal que alguna decaiga.

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  5. A mí tampoco me convenció mucho.
    Y veo tu comentario de arriba y claro que es normal que el hombre decaiga de vez en cuando...pero bueno, que tiene peliculones..
    Un saludo.

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    1. Ese ritmo que lleva es espectacular, y sigue encontrando gente que le financie. Aunque la pareja de productores Joffe-Rollins ya no sale en los créditos (alguno de ellos como productor ejecutivo).

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  6. Estoy muy en la línea de Troyana, me agradó sin llegar a los límites de otras de sus obras ( ahora resulta difícil conseguir ese grado de entusiasmo y sorpresa) pero no me ha decepcionado. Se sigue esperando q suba el listón continuamente y me temo que eso es difícil.
    Un abrazo

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    1. Bueno, yo no espero que vuelva a hacer "Manhattan", por poner un ejemplo, pero sí que aspiro a ver cintas como "Medianoche en París", por decir alguna reciente.
      Abrazos.

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  7. Como U-topia menciona el bostezo, recuerdo la secuencia en el Observatorio. Enamoramiento tras el chaparrón. La ricura de la medio-medium allí mismo, y al protagonista no se le ocurre otra que darse una "cabezadita". ¿Síntoma de decrepitud del abuelo? Allen está echando una carrera a D. Manoel Cándido.

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    1. Sí jajaja. Bueno en defensa de Allen, creo que lo que viene a continuación de la cabezadita es la mejor secuencia de la película, una escena onírica (a lo mejor el protagonista sigue soñando) con los dos mirando al cielo.

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  8. Lástima, una ocasión perdida para Allen de regalarnos otra obra maestra. Y es que, amigo, la sombra de la medianoche en París es más alargada que la propia luz de la luna, en Provenza. Pero, seguramente, en la próxima volverá el gran Allen. Por cierto, hace poco vi "Vicky, Cristina, Barcelona" por puro morbo y vocación masoquista, ya que había oído cosas muy malas de ella. Bueno, pues aún me pareció peor de lo que esperaba. Es lo peor de Woody Allen, un director que me encanta. Abrazos Ethan.

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  9. ¿Sabes lo que creo? Que el viejo Woody tenía el entorno, el ambiente, el mismo de la película de París, y metió una trama simplona sólo para poder volver a ese mundo a lo Scott Fitzgerald. De ahí que el resultado fuera un poco desastroso.
    Abrazos

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  10. Esta creo que va a desaparecer de la cartelera sin que yo pase a verla, pero bueno, ya vendrá el dvd. Tu apreciación va en línea con lo que he oído acerca de la película.
    Saludos.

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    1. Pues no creo que te pierdas nada porque Allen no aprovecha muy bien que digamos la pantalla panorámica, así que dvd por si tienes curiosidad y a correr...

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  11. Sabes que me resulta una película simpática y encantadora dentro de sus limitaciones. El homenaje a "My fair lady" me agrada. Sin ir más lejos, me resultó más fácil de digerir que "Blue Jasmine" (¡ay!, el caramelo), pese a vuestras opiniones al respecto. Saludos.

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    1. No eres el único, hay bastante gente que le ha gustado la película. Por lo menos Woody Allen ha conseguido diversidad de opiniones, algo más que con Vicky Cristina Barcelona, por ejemplo. Saludos.

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  12. El reparto de esta película vaya que valía la pena. Por ciertos aspectos como el tema del ilusionismo, me recuerda un poco a la serie El Hipnotizador, una historia donde se revelan secretos y enigmas a través de la hipnosis, en fin quiero volver a ver este filme para entenderlo mejor.

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    1. No es de los filmes que repetiría de Allen, y tampoco creo que tenga mucho más que explicar en una trama algo simplona. Pero quién sabe, puede que dentro de unos años se presente la oportunidad (en la tele, por ejemplo) para verla de nuevo y a lo mejor nos sorprendemos de que ha ganado con el tiempo.
      Saludos.

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