miércoles, 14 de septiembre de 2016

2 X 1: “TENUE DE SOIRÉE” y “DEMASIADO BELLA PARA TI” (Bertrand Blier)


Tenue de soirée (1986)

Si hay un director francés que utiliza el cine para provocar a la burguesía de su país este es Bertrand Blier. Hijo del actor Bernard Blier, con el que no hay que confundir, se inició en el cine con el documental y destacó como realizador de éxito con la singular Los rompepelotas (Les valseuses, 1974), obra iconoclasta y descarada que le guiaría en su carrera posterior hasta el día de hoy.

En la misma línea desafiante contra la moral conservadora, y con el mismo actor protagonista (Gerard Depardieu), Blier rodó en los años ochenta una serie de éxitos entre los que destacan las dos películas que hoy reseñamos.

Tenue de soirée es una comedia muy cercana a Los rompepelotas, en cuanto trata de un trío (dos hombres y una mujer) que se dedican al robo tan sólo por ir en contra del sistema establecido. La diferencia entre los dos filmes es la perversión sexual que padecen los protagonistas de Tenue… debido a las relaciones bisexuales que se establecen entre ellos: mientras Antoine (Michel Blanc) no puede dejar de amar a su mujer Monique (Miou-Miou), ella se siente atraída por Bob (Gerard Depardieu), que a su vez intenta seducir a Antoine. El conflicto plantea situaciones cómicas, pero también dramáticas hasta el punto de llevar a los personajes a prostituirse con tal de no cejar en su intento de normalizar una situación que es imposible de manejar.

Con un guión en ningún caso políticamente correcto, que seguro hará sonrojar a más de un espectador —hoy el efecto es menor aunque se adivina lo que supuso en su día—, Blier parece querer dar un golpe en la mesa que haga saltar todo tipo de prejuicios, en especial el sexual, para finalmente salirse con la suya.




Demasiado bella para ti  (Trop belle pour toi, 1989)


A finales de los ochenta el cine de Blier se vuelve algo menos retador (sólo un poco), y también más serio con este estupendo melodrama que, de todas formas, sigue rozando el surrealismo, de nuevo con Gerard Depardieu al frente del reparto.

El argumento es otra vez osado: el director de una empresa de automoción (Gerard Depardieu), casado y con dos hijos, se lía con su secretaria. Hasta ahí nada nuevo, un triángulo amoroso con sus conflictos, separaciones y reconciliaciones que no aporta originalidad si exceptuamos un detalle: la mujer del empresario no puede ser más bella y joven (la espectacular Carole Bouquet), mientras que la amante es bastante mayor, gorda y fea (Josiane Balasko).

Una ocasión más para que Blier reparta polémica para todos los lados: los prejuicios sociales, el tema de la mujer objeto, el rechazo a la fealdad sin tener en cuenta a la persona, etc. No obstante, la trama parece ir en el sentido correcto cuando el marido se enfrenta a su mujer y reconoce que se ha enamorado de otra persona, y esta vez no ha sido por su físico como la propia esposa podrá comprobar.

Claro que Blier no se conforma con la moralina fácil: pronto la nueva pareja se tambalea cuando el personaje interpretado por Depardieu comienza a aburrirse y a darse cuenta que sólo le atraía el sexo. Enseguida la vergüenza por salir con una mujer poco agraciada y de una clase social baja saldrá a la luz y todo se vendrá abajo. Es decir, la realidad finalmente se impone a una situación a todas luces anómala. Eso sí, cuando el empresario quiera volver con su esposa “modelo” ya las cosas no serán igual…  




4 comentarios:

  1. De Los rompepelotas puedo decir que la vi en el cine de mi provincia cuando era niño. Todavía en los cines no se pedían el DNI, es más, ni lo tenía hecho. Recuerdo que me impresionó muchísimo porque nunca había visto unos pechos de mujer y ese descaro, pero a la vez, natural del sexo por parte de ese trío. No olvidaré a aquella mujer que está en un vagón de tren dándole el pecho a su bebé y uno de ellos le pide que le deje chupar a su amigo. ¡Y no pasa nada! El tipo se pone a chupar. Hoy, que las mujeres sacan el pecho en cualquier parte para dar el pecho a su retoños (no puedo dejar de ser sincero, amigo mío) me pongo a pensar en aquella escena... y... no sé si me atrevo a decirlo... ¡Me dan ganas de pedirles que me dejen dar una churrupaita! Ay, es lo que tiene según qué tipo de películas vistas a la edad no debida.

    Estupendo post.

    Abrazos

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  2. ¡Ah! Esa road movie genial, y la secuencia que nombras es de lo mejor. Hay otra cinta de Blier muy parecida: "¿Quieres ser el amante de mi mujer?", de nuevo un trío haciendo de las suyas. También "Tenue de Soriée" va en el mismo sentido del descaro y la transgresión.
    Un abrazo.

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  3. Vi "Tenue de soirée" en un cine en V.O. y me pareció muy divertida ( no tanto cuando la vi en TV con el título "Vestido de fiesta" con un nefasto doblaje) Es curioso que uno de los actores, Michel Blanc, se parece bastante a Bernard Blier, el padre del director. Recuerdo a Bernard de comedias muy buenas como "Amici miei".
    Saludos!
    Borgo.

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    Respuestas
    1. Siempre mejor la versión original, y más en películas como éstas, tan francesas...
      Bernard Blier era un poquito más gordito y es verdad que principalmente actor de comedias. En "Buffet froid", otra vez con Gerard Depardieu, lo dirigió su hijo Bertrand, otra de sus pelis recomendables.
      Saludos.

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